
La ponferradina de 28 años Lidia Valentín, posiblemente la mejor levantadora española de la historia, estará en el Real Grupo de Cultura Covadonga para participar en el Trofeo 75 Aniversario de halterofilia del club, el sábado 21 a partir de las 11 horas. Con dos diplomas olímpicos entre sus más preciados trofeos, Lidia desprende vitalidad y sencillez en su conversación y nos atendió después de uno de sus entrenamientos en la residencia Joaquín Blume.
Ya conocía el Grupo de otras competiciones pero, tras ver el video de la entidad, nos contaba “me parece un club increíble. Que promocionéis de esta manera el deporte base es fundamental en cualquier comunidad, es primordial, inculcándoles desde bien pequeños los valores del deporte. Hacéis una labor muy buena con tantos socios y deportistas federados.”
Recordando la reciente elección de Japón como sede de los JJOO de 2020, Lidia reconoce que es un duro golpe para todos los deportes olímpicos por lo que hubiese significado para ellos que Madrid hubiese sido la elegida, pero aconseja a todos los jóvenes deportistas que “la ilusión nunca hay que perderla. Si realmente quieres y lo tienes claro hay que luchar por los sueños y seguir adelante. No hay que abandonar aunque salgan trabas en nuestro camino”, “Esto es parte de la disciplina y los valores que te da el deporte. Con ilusión y motivación como base principal de cualquier deportista, siempre te queda la satisfacción personal”.
Con la vista puesta en el Mundial de Polonia que tendrá lugar desde el 16 al 23 de octubre, nos cuenta que está en plena preparación de la competición y el torneo del Grupo es una parte más de ella, “El objetivo es llegar en un estado de forma increíble y hacer marcas personales. Superando las marcas que tengo, las posiciones vienen después”, comenta Lidia que insiste en que “no te puedes cegar en querer una posición, porque realmente no depende de uno mismo, hay muchos factores externos como qué rivales estén y su estado de forma”.
Al terminar la conversación nos paramos a pensar en esa sencillez y buena energía que nos ha transmitido. Un placer para nosotros el haber podido tener esta pequeña charla con toda una deportista del más alto nivel, sabiendo que podremos volver a disfrutar de ella, esta vez en persona, cuando nos visite en lo que esperamos sienta como su casa, el Grupo Covadonga.